Ayer estuve de concierto en Estocolmo viendo a los Beatsteaks. El grupo es alemán aunque cantan en inglés, así que todo el bar estaba lleno de alemanes, de hecho de los 6 que íbamos yo era el único no alemán.
Por la mañana me levanté con un catarrazo monumental, me pasé todo el día moqueando y llorando, así que ir hasta Estocolmo con el frío que hacía por las calles no era la mejor idea. El bareto está incrustado debajo de uno de los puentes que unen Gamla Stan (la isla de la ciudad vieja) con la zona sur, y cuando llegamos no había mucha gente. La verdad apenas habría unas 100 personas, pero había suficientes como para dar un par de botes. Del grupo sólo había oído un par de canciones y la verdad es que suenan bien, pero así de primeras no me parecieron muy cañeros como me dijeron los alemanes, que en todos los conciertos la gente no para de saltar. Y una vez que empezaron a tocar me sorprendieron agradablemente, son una banda de 5 con mucho teatro que desvariaban cada dos por tres. A los cinco minutos ya estabamos todos dando botes, todos los alemanes, mis viruses y yo, aunque no me supiera las canciones.
Hubo un par de cosas que me gustaron mucho. El cantante aparte de tocar la guitarra de vez en cuando, tiene una pequeña mesa de ritmos y entre canciones se ponían a poner canciones extrañas y a hacer el tonto, genial para que no se haga repetitivo el concierto. La otra cosa curiosa es que, gracias a que tenían todos los instrumentos y micrófonos inalámbricos (apuntate ésta César), en una de las últimas canciones, el cantante despareció por detrás del escenario y apareció, sin parar de cantar, saltando en la barra del bar y luego intentándo abrirse camino hasta el escenario otra vez.
En definitiva, un buen grupo y un buen concierto, ya hacía mucho tiempo que no iba a ninguno. Os dejo un par de videos del grupo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Los inalámbricos son caros, pero tomo nota...
Los inalámbricos son caros, pero tomo nota...
Publicar un comentario