Con motivo de la visita hubo que hacer el tradicional paseo por Uppsala y Estocolmo enseñando más o menos lo de siempre.
La catedral de Uppsala.
El museo de Upplands.
El palacete-castillo antes de que anochezca.
Gamla Stan en Estocolmo.
El museo de arte moderno de Moneo que estaba cerrado justo después de un chaparrón.
Y el monumento al gatillazo.
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1 comentario:
Jeje, que envidia me das¡¡
Si tuviese pasta y no estuviera agobiado de examenes ya te habría ido a ver...
Pero yo no te llevaría una botella de Ron, nada de eso, un buen Ribera y un taco de Jamón, que es lo que hace falta por allí.
Un saludo¡¡
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