lunes, 26 de febrero de 2007

No se lo digas a nadie pero...

En momentos de tensión, estrés y cosas que hacer que me entra el bajón y me rayo y entro en bucle y lo veo todo negro, uhuhuhuh!!!, pues nada mejor que algo de delinqüencia canalla para verlo todo una nota más alegre.
Así que después de una semana de soledad casera, drogas y en espera de una guitarra a la que poder tocarle las cosquillas, me encuentro otra vez a desoras haciendo lo que debería haber hecho antes si fuera un buen chico. Así que a ver si dejamos de lado un poco la seriedad y le echas una sonrisa al espejo para que se ría. Y así de subidón de endorfinas y después de saltar un poco en la cama, vuelvo a mis quehaceres pero con la cabeza un poco más en las nubes para coger perspectiva y alcanzar a verte desde lejos.
"Improvisemos un guión definitivo, que no tengamos más remedio que olvidar".

1 comentario:

Ana Abad dijo...

Yo estaba en Egipto :P